Según la revista Cuida tus Encías, los implantes dentales siempre han sido la solución para cubrir la ausencia de dientes y de ti depende el cuidado de los implantes y el tiempo que durarán.
El uso de implantes dentales para sustituir a los dientes se ha convertido de una de las opciones más eficientes para los clientes. debido a la comodidad que proporcionan. Pero si no se adoptan una serie de medidas básicas, como es el mantenimiento del implante de limpieza en casa o su higienización por parte del odontólogo de manera periódica, pueden aparecer complicaciones en los implantes, como por ejemplo las enfermedades periimplantarias.
El mejor tratamiento, la prevención
Para evitar la aparición de una enfermedad periimplantaria se deben establecer medidas preventivas. Seguir un estricto control de la salud de los implantes y un cuidado bucodental igual que el que se lleva a cabo con los dientes naturales.
Aunque se realicen cualquier tipo de tratamiento, puede darse el caso de que surja la periimplantitis, por lo que posteriormente se procederá a realizar tratamientos para eliminar las bacterias entre la encía y el implante.
La persona afectada con esta enfermedad deberá realizar diversos cambios en sus hábitos, como por ejemplo, si es una persona fumadora, dejar de fumar o también a la hora de realizar la higiene dental en casa, es primordial de forma minuciosa. También, las personas con diabetes deben acudir a su medico habitual para confirmar que los niveles de azúcar en sangre son los adecuados y no están por encima de los permitidos.
El implante utilizado es importante para reducir riesgos
El implante que elija el profesional es importante para evitar la filtración bacteriana que es uno de los factores desencadenantes de la enfermedad periimplantaria o periimplantitis. La periimplantitis provoca inflamación de la encía y pérdida de hueso alrededor del implante, lo que puede terminar en fracaso de ese implante y que haya que extraerlo para regenerar hueso. Consulta con tu dentista para que elija un implante con gap cero en la conexión con la prótesis para evitar la filtración bacteriana.